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miércoles, 31 de enero de 2018

¿Es un valor o un perjuicio tener más de 30 años a la hora de buscar trabajo?

 

Puede que, como por desgracia ocurre a tanta gente en España (y en otros muchos países), las cosas no te vayan como te gustaría, sobre todo si te encuentras en situación de desempleo. O también si estás trabajando pero tu empleo no te llena y las condiciones económicas son malas. Pero, en ningún caso, la situación del mercado laboral en España debe llevarte a pensar que eres tú, como persona (que es siempre lo más importante) o como trabajador, quien no está a la altura o que no eres un candidato válido por su edad.

Todos tenemos unas cualidades y unos puntos más débiles. De lo que se trata es de potenciar esas virtudes -profesionales en el caso que nos ocupa- y de trabajar para mejorar, en la medida de nuestras posibilidades, las debilidades que podemos tener.

buscar trabajo con más de 30 años

Tener más de 30 años no es ningún obstáculo a la hora de buscar trabajo (iStock)

La edad no es ninguna debilidad salvo que, lógicamente, hayas pasado la edad de jubilación o estés llegando a ella. Y mucho menos aún por el hecho de tener 30 ó más años. Es más, si tienes una edad que se mueve alrededor de esa franja, te damos la enhorabuena porque el período comprendido entre los 25 y los 35 años es seguramente el mejor para encontrar trabajo.

Por lo general, buscar trabajo con más de 30 años no tiene por qué ser más difícil que buscar empleo con 22 años ni más fácil que buscar ofertas de trabajo para mayores de 45 años. Es cierto que hay trabajos más pensados para gente joven y otros para profesionales con más experiencia, pero la edad no es lo más importante a la hora de buscar trabajo.

En primer lugar, porque la edad no es lo mismo que la experiencia, que es mucho más importante. Un candidato puede tener 25 años y mucha experiencia en su sector y otro, en cambio, puede tener 40 años y acumular menos experiencia relevante para un puesto de trabajo determinado.

Y en segundo lugar, porque hay otros aspectos que los reclutadores de personal valoran más en un candidato que su edad, como la formación, el dominio de las herramientas necesarias para realizar su trabajo o la capacidad de liderazgo o de trabajo en equipo, por poner algunos ejemplos.

Por responder a la pregunta que nos hacíamos en el título del artículo, buscar trabajo con más de 30 años no es ningún perjuicio. Incluso, de ser algo, es un valor añadido porque no todas las empresas están dispuestas a formar a los trabajadores más jóvenes y, por desgracia, hay muchos empresarios que descartan como candidatos a los trabajadores de más edad.

Si nos fijamos en los datos de empleo de diciembre de 2017, el mayor descenso en el paro interanual se produjo, en términos porcentuales, en la franja de edad comprendida entre los 30 y los 44 años, con un descenso del 10,84% (15,01% en los hombres y 7,88% en las mujeres de esas edades), frente al descenso del 8,88% en los menores de 25 años; del 8,37% en los trabajadores con edades entre los 25 y los 29 años; y la reducción del 5,42% en el desempleo entre los mayores de 45 años.

Los 30 y los 40 años son unas décadas perfectas para trabajar porque, siempre hablando en términos generales, hacen que los candidatos reúnan los conocimientos y la experiencia relacionadas con su madurez con la vitalidad propia de los jóvenes. Otra cosa es que los demás sepan verlo…

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lunes, 29 de enero de 2018

Trabajar desde casa vs ir a la oficina

 

¿Qué es mejor: trabajar en casa o en la oficina? De entrada, lo más importante es el hecho en sí de tener empleo y estar contentos con el trabajo que tenemos con independencia del lugar en el que lo desarrollemos. Dicho esto, es probable que, como nos suele pasar con tantas cosas en la vida, pensemos que la mejor opción entre trabajar en casa o en la oficina es la contraria a la nuestra. Es decir, muchos (no todos) de quienes trabajan en una oficina desearían poder trabajar desde casa; y a muchos (tampoco a todos) de los que trabajan en casa les gustaría trabajar fuera para, entre otras cosas, tener más vida social.

trabajar en casa o en la oficina

Imagen de una chica trabajando desde su casa (iStock)

También como tantas otras cosas en la vida, tanto trabajar desde casa como trabajar en una oficina tienen sus pros y sus contras. El problema es que nos cuesta más ver las ventajas de la opción que se ajusta a nuestra realidad y con frecuencia creemos que la otra alternativa es mejor que la nuestra.

Si trabajas fuera de casa es bastante probable que desees trabajar desde casa para no tener que aguantar a tu jefe y/o a algunos de tus compañeros, no tener que gastar dinero en transporte, evitar atascos si vas en coche al trabajo o aglomeraciones si utilizas el transporte público, tener menos estrés y, por qué no, ganar unos cuantos minutos de sueño cada día al no tener que desplazarte para ir a trabajar.

Todas estas son ventajas de trabajar desde casa, pero no debemos caer en el error de pensar que el teletrabajo no tiene también sus desventajas o que no hay nada positivo en trabajar fuera de casa. Una buena manera de comprobarlo es hablar con alguien que lleve tiempo trabajando desde su casa.

Aunque esa persona esté contenta con su situación laboral, es probable que te reconozca que echa de menos entrar y salir todos los días de casa, el contacto con la gente y las cañas con los compañeros después del trabajo. Y puede que en algunos casos y momentos te reconozca que le cuesta mantener una disciplina de trabajo, que le falta motivación o que no recibe ningún reconocimiento por su trabajo. Y si no, sólo tienes que lanzar el comentario que más puede molestar a una persona que trabaja desde casa: “¡Qué suerte tienes, qué bien vives!”…

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10 formas de provocar tu propio despido

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7 cosas que haces que te asemejan con un millonario

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David García OficinaEmpleo.com

jueves, 25 de enero de 2018

5 riesgos de trabajar en el sector limpieza que desconoces

 

Los riesgos del sector limpieza a los que se enfrentan los trabajadores son seguramente más, en número y en relevancia, de los que podamos pensar en un principio. Sólo quienes trabajan o han trabajado en este sector conocen realmente cuáles son los peligros derivados de su trabajo, sobre todo si han sufrido algún tipo de accidente laboral.

riesgos del sector limpieza

El riesgo de caídas es sólo uno de los peligros a los que se enfrentan los trabajadores de la limpieza (iStock)

Si trabajas o buscas ofertas de empleo para trabajar en el sector de la limpieza, es importante que extremes las precauciones para que no sufras las posibles consecuencias de estos y otros riesgos del sector limpieza. Y si contratas personal de limpieza o mantenimiento, también es importante que tengas en cuenta estos riesgos a los que pueden enfrentarse los trabajadores y que tomes las correspondientes medidas para garantizar la seguridad.

 

1. Caídas

Limpiar por fuera los cristales de los edificios de gran altura es uno de esos trabajos de riesgo que no están lo bien pagados que deberían. El peligro que corren quienes realizan su trabajo en las alturas pese a las medidas de seguridad adoptadas es el más evidente, pero tampoco debemos olvidar el riesgo de posibles caídas a los que se enfrenta el personal de limpieza al limpiar escaleras y suelos.

 

2. Toxicidad

Otro de los riesgos del sector limpieza lo representa la toxicidad de los productos químicos utilizados para la limpieza de calles, oficinas, casas y edificios en general. Los guantes y las mascarillas son dos instrumentos de trabajo necesarios para reducir este riesgo. El problema es que el riesgo no desaparece por completo y que no todos los trabajadores de la limpieza los utilizan…

 

3. Cortes

Los trabajadores del sector de la limpieza tampoco están exentos de sufrir cortes al manipular objetos de vidrio o cerámica y al retirar residuos, por ejemplo.

 

4. Daños en músculos y articulaciones

El cuello, la espalda y la zona lumbar son, como en muchas otras profesiones, partes del cuerpo que acusan especialmente los esfuerzos propios de las tareas de limpieza y de mover o cargar objetos pesados.

 

5. Electrocución

Uno de los grandes peligros a los que se enfrentan los trabajadores de la limpieza y de otros sectores es el riesgo de electrocutarse y más aún porque no es un peligro tan evidente como otros. Una mala instalación eléctrica y la combinación de electricidad y suelos mojados pueden acabar en una tragedia.

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7 cagadas online que te pueden dejar sin trabajo

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David García OficinaEmpleo.com

5 motivos por los que tu trabajo no te hace feliz y no lo sabes

A veces tiene que ocurrir algo concreto para que uno se dé cuenta de que no es feliz en su trabajo y que debe empezar a buscarse una salida. Vamos a intentar entre todos que eso nunca llegue a producirse y para ello vamos a darte algunas claves para que hacerte ver que evidentemente no eres feliz en tu trabajo. ¿Estás en alguno de estos casos?
Empleado infeliz. Adrian825 (iStock)

Empleado infeliz. Adrian825 (iStock)

1. Levantarte por las mañanas

A nadie nos gusta madrugar pero cuando te levantas ya de un mal humor insoportable, estás irascible o por ejemplo ya te levantas cansado de no dormir bien (algo no te deja descansar como deberías) y te cuesta horrores ir al trabajo, tal vez es porque tu cuerpo te está lanzando una señal: no eres feliz.

2. La relación con la familia o amigos.

Seguimos con tu humor, en este caso en relación a tu familia y amigos. Si siempre estás de uñas, irascible, discutes en tu casa y hasta cuando quedas para tomar algo (y antes no te pasaba), te recomendamos que mires a tu alrededor y te preguntes si tu trabajo tiene que ver en algo. Puede ser que tu frustración laboral, tu infelicidad, la estés pagando con quién menos culpa tiene.

3. Malos hábitos.

La infelicidad en el trabajo puede traducirse también en la adquisición de malos hábitos como fumar, beber o la adicción a otras sustancias. No solo eso, también en la mala alimentación debido a la apatía y a las pocas ganas que puedes tener para prepararte algo más elaborado. Si estás envolviéndote de esas dinámicas, analiza por qué es.

4. Deterioro físico.

Todo lo dicho anteriormente puede provocar un deterioro de tu estado físico que va desde una dejación en el cuidado personal hasta pérdida de peso o de cabello (debido al estrés) o incluso disfunciones de tipo sexual. Tu felicidad en el trabajo es muchas veces tan importante que se refleja en la felicidad en otros ámbitos.

5. Falta de resultados.

Por último, estar mal en el trabajo provoca también una menor productividad y se traduce en unos peores resultados. Si los ves antes que tu jefe, tal vez puedas ponerle remedio o darte cuenta al menos de que hay que buscar una solución. Si no, es posible que seas despedido por bajo rendimiento.

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David García OficinaEmpleo.com

Cómo hablar a tu jefe sobre una discapacidad invisible

Cuando hablamos de alguien y decimos que tiene una discapacidad, todos tendemos a pensar que se trata de algo perceptible a primera vista. Pensamos en unas muletas, en una silla de ruedas, en una ceguera, en algún tipo de síndrome visible… Sin embargo, esto no siempre es así. Y cuando pasa se abre un dilema en el afectado a nivel laboral: ¿ha de comunicarlo a sus jefes? La respuesta debería ser afirmativa en la mayoría de los casos.
Jefa y empleado hablan en un despacho. AntonioGuillem (iStock)

Jefa y empleado hablan en un despacho. AntonioGuillem (iStock)

1. ¿Qué es una discapacidad invisible?

Son personas con alguna discapacidad cognitiva que no se ve, que no es evidente o pasa muy desapercibida a primera vista. También se trata de enfermedades crónicas que se presentan en forma de ‘brotes’ como la depresión, el lupus o la epilepsia, por poner tres ejemplos. En cualquier caso, todo ello puede afectar al rendimiento de la persona en el trabajo, o por lo menos podría hacer que se ausente.

2. Información veraz.

Tienes que tener en cuenta que tu jefe te contratará por tus cualidades y porque pensará que harás bien tu trabajo, al margen de tu discapacidad. Por eso, es necesario que seas sincero con él al menos (no tienes por qué hacerlo con tus compañeros) pues es él quien ha de estar prevenido ante eventuales problemas o incidencias que puedan ir surgiendo, o de las citas médicas que puedas tener. Es importante en este sentido tener el tiempo suficiente para hablarle sobre esa discapacidad y ofrecerle información útil, veraz, para que no se alarme.

3. No es incapacitante.

Tu discapacidad (aunque suene contradictorio) no te discapacita para hacer tu trabajo. Si fuera así, ya habrías pasado por un tribunal médico, ¿no crees? Eso se lo tienes que dejar muy claro, para que en ningún momento dude de que el trabajo, en condiciones habituales, va a salir adelante.

4. Posible acoso laboral.

En el caso de las discapacidades cognitivas que no se ven, existe un peligro implícito y es que puede haber personas (compañeros de trabajo en este caso) que se aprovechen o abusen de ellas. Se trata de situaciones difícilmente detectables para la mayoría de nosotros pero que hace mucho daño y por eso hay que poner en alerta al jefe por si eso pudiera ocurrir. También puede ocurrir, por qué no, en discapacidades invisibles de carácter físico.

5. Prevención.

Puede haber discapacidades invisibles que puedan mitigarse con una serie de medidas que se implementen en el trabajo. Habla a tu jefe de ellas e intentad ponerlas en marcha. Todo es poco para evitar que esa discapacidad se manifieste o te impida en un momento dado hacer tu trabajo, y así desarrollarás tu jornada con menor preocupación y con mayor seguridad.

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David García OficinaEmpleo.com

miércoles, 24 de enero de 2018

5 cláusulas que deberías revisar de tu contrato de alquiler

 

En alguna ocasión hemos hablado en este mismo blog de Oficina Empleo de la importancia de leer con detalle los contratos de trabajo. Lo normal es que no haya nada raro en el contrato que implique un engaño al trabajador, pero siempre es preferible leerlo con calma por si acaso. Igual que las posibles cartas de despido, finiquitos e indemnizaciones que nos puedan entregar a lo largo de nuestra vida profesional -ahí sí que es más probable que pueda existir algo que no se ajuste a la legalidad-.

cláusulas del contrato de alquiler

Una mujer revisa un contrato (iStock)

Esta vez queremos centrarnos en las cláusulas del contrato de alquiler que, a pesar de no ser legales, figuran con cierta frecuencia en los contratos de arrendamiento. Si tu contrato de alquiler tiene estas cláusulas, debes saber que no son legales…

 

1. Adelanto del pago del alquiler superior a un mes

¿Tu casero te ha pedido que le adelantes el pago de más de un mes de alquiler? Pues, según la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU), esa no es una práctica legal porque el arrendador no puede exigir el pago por adelantado de más de una mensualidad de renta.

 

2. No dejar que el inquilino prorrogue el contrato de alquiler

La Ley de Arrendamientos Urbanos también recoge que, una vez transcurrido un año del arrendamiento, la prórroga es obligatoria para el arrendador y voluntaria para el arrendatario durante un período máximo de tres años. Por eso el propietario no puede impedir que el inquilino prorrogue el contrato transcurrido el primer año, salvo en caso de que el propietario necesite la vivienda.

 

3. Obligatoriedad de permanencia durante un año

Tu casero no te puede obligar por contrato a permanecer un período mínimo de un año viviendo en su inmueble. Una vez que hayan pasado al menos 6 meses puedes, como inquilino, extinguir el contrato de alquiler con la correspondiente penalización establecida por ley.

 

4. Derecho de acceso del arrendador a su vivienda alquilada

Tampoco es legal que entre las cláusulas del contrato de alquiler se incluya el supuesto derecho del arrendador a acceder a su vivienda alquilada cuando desee.

 

5. Obligar al arrendatario a hacerse cargo de todas las reparaciones

El inquilino debe encargarse de las reparaciones derivadas del uso habitual de la casa y de posibles malos usos o negligencias, pero no tiene por qué asumir también cualquier otra reparación cuya responsabilidad debe correr a cargo del propietario. Cualquier cláusula que obligue al inquilino a responsabilizarse de todas las reparaciones no es legal.

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7 situaciones que has vivido seguro si trabajas de cara al público

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David García OficinaEmpleo.com

martes, 23 de enero de 2018

6 aplicaciones con las que podrás ganar dinero

Cualquiera de nosotros pensaría de primeras que el móvil solo ofrece gastos y ningún ingreso. Pero si pensáis así, os equivocáis. Y es que podéis sacarle mucho rendimiento a través de diferentes aplicaciones que te permitirán ganar un ingreso extra. No te vas a poder retirar con eso, obvio, pero te servirá para obtener algo de dinero, también canjeable para gastar por ejemplo en Amazon.

Un smartphone y dinero. Golubovy (iStock)

Un smartphone y dinero. Golubovy (iStock)

1. Gelt.

Su eslogan deja bien a las claras lo que obtendrás con ella: “Dinero, no cupones”. Su uso es muy sencillo. Te descargas la app (solo es de uso aquí en España), y cuando vayas al súper a hacer la compra, adquieres alguno de los productos de su catálogo, subes la foto del ticket de compra a la aplicación y en 48 horas te dan la comisión correspondiente.

2. BeMyEye.

La mecánica de esta app es diferente a la anterior. En esta el dinero no lo obtienes por demostrar que compras los productos que te ‘sugieren’, sino por hacer lo que se llaman ‘misiones’, es decir, pequeños trabajos para las grandes empresas que contratan los servicios de BeMyEye. Tendrás que demostrar (normalmente con fotos) que completas esas misiones y solo con eso recibirás pequeñas cantidades de dinero.

3. Simply Tasks.

Esta app es muy parecida a la anterior, también a través de misiones. ¿Qué ganan las empresas con ello? Sobre todo recopilar información útil de los usuarios que luego son utilizados por las propias empresas. Las misiones son tareas sencillas como comprobar precios en tiendas por poner un ejemplo, y una vez superada el usuario recibe la remuneración que se podrá canjear en PayPal.

4. StreetBees.

Seguimos con las tareas… pero esta vez mejor remuneradas porque dicen que con esta app británica (pero disponible en castellano) puedes llegar a ganar hasta 10 euros en una hora. Y las tareas sueles ser bastante sencillas, simplemente responder a algún cuestionario.

5. mobileXpression.

¿Te imaginas estar monitorizado? Pues eso es lo que hace básicamente esta app, que ‘vigila’ todo lo que haces con tu Smartphone (webs que visitas, apps que te descargas, imágenes que descargas, vídeos que ves…) y manda toda esa información a empresas. La app garantiza que no monitoriza ni el calendario, ni los mensajes, ni las fotos. El beneficio para quien la instala es obtener algo de dinero. Tras una semana de uso, cinco euros en Amazon por ejemplo.

6. AppKarma.

¿Te gustaría cobrar por probar apps? Pues esa es una de las características de esta aplicación, que te invita a descargarte y a probar otras diferentes, pero también por ver vídeos por ejemplo.

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David García OficinaEmpleo.com

lunes, 22 de enero de 2018

5 consejos para empezar a trabajar en la tienda de tu barrio

 

A veces no hace falta irse muy lejos para encontrar trabajo. De hecho, puede que encontrar empleo sea algo que está más cerca de lo que pensamos y no sólo en el tiempo -ojalá que sea así si te encuentras en situación de desempleo o quieres cambiar de trabajo-, sino también en el espacio. Puede que tengas la oportunidad de encontrar trabajo a la vuelta de la esquina tanto en sentido literal como en sentido figurado. Por ejemplo, con un trabajo como dependiente en una tienda de tu barrio.

trabajo como dependiente

Imagen de una chica trabajando en una tienda (iStock)

Para tener más opciones de conseguir el empleo (y para mantenerlo), te recomendamos que sigas estos 5 consejos sobre cómo trabajar en una tienda:

 

1. Recorrer los comercios de la zona

¿Se puede buscar trabajo mientras paseamos por la calle? Por supuesto. Y no nos referimos a buscarlo por internet a través de nuestro teléfono móvil, sino a fijarnos en los típicos carteles de “Se necesita dependiente/a” o “Se necesita personal” que puede haber en los escaparates de los comercios. Eso sí, en cuanto veas un anuncio de empleo que te puede interesar, no dudes en entrar y pedir más información sobre el puesto de trabajo y el perfil que solicitan…

 

2. Dejar tu currículum en mano

Salvo que en la tienda nos indiquen lo contrario, es preferible que entreguemos nuestro currículum en persona en lugar de enviarlo simplemente por correo electrónico. Y más aún si se trata de un comercio tradicional o una tienda que no pertenece a una cadena (en ese caso los procesos de selección de personal suelen estar centralizados y lo habitual es que tengamos que enviar el currículum por correo electrónico o rellenar un formulario en su web).

 

3. Presentar nuestra propia candidatura

Normalmente, cuando buscamos trabajo no sólo nos inscribimos a las ofertas de empleo que se publican, sino que también enviamos nuestro currículum a las empresas por nuestra cuenta. A la hora de buscar trabajo como dependiente en una tienda sucede algo parecido: no sólo debemos fijarnos en los anuncios de empleo, sino que también es recomendable que preguntemos en las tiendas donde nos gustaría trabajar si necesitan personal.

 

4. Sembrar para el futuro

Puede que en el momento en que busquemos trabajo como dependiente en una tienda no necesiten a nadie, pero tan probable como eso es que sí necesiten personal en un futuro. Así que no está de más asegurarnos de que se quedan con nuestro currículum y con nuestros datos de contacto para otras ocasiones. Eso sí, para eso es mejor hablar con el propietario y no con un dependiente que pueda ver amenazado su puesto de trabajo y tire nuestro currículum directamente a la papelera…

 

5. Consultar las ofertas de Oficina Empleo

Seguro que ya lo sabes pero, por si acaso, en oficinaempleo.com tienes a tu disposición un buscador de ofertas de trabajo donde puedes escribir el tipo de empleo que buscas y la localidad que te interesa. De hecho, el ejemplo que aparece en la web es “dependiente madrid”…

 

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5 cosas que puedes hacer si estás en el paro

 

Encontrarse en situación de desempleo o, coloquialmente, estar en el paro, no implica tener que estar todo el día encerrados en casa buscando trabajo. De hecho, no sería nada recomendable ni nada bueno para nuestra salud física y mental dedicar demasiadas horas cada día y cada semana a buscar empleo.

que hacer en paro

Imagen de una chica haciendo un gesto de reflexión (iStock)

Por eso, te damos algunas ideas para tomar aire si estás en situación de desempleo y después retomar la búsqueda de trabajo con más energía…

 

1. Cursos de formación

Es verdad que no fácil estar en el paro y menos aún si la situación de desempleo se prolonga mucho. Pero, a pesar de los lógicos bajones en el estado de ánimo, hay que intentar mantener el optimismo y aprovechar para hacer cosas que difícilmente podemos hacer cuando trabajamos. Por ejemplo, realizar cursos de formación que nos ayuden a especializarnos en nuestro área profesional o a iniciarnos en un nuevo área.

 

2. Estudiar inglés

Nunca está de más mejorar nuestro nivel de inglés porque puede ayudarnos a encontrar trabajo. Y aunque no hace falta quedarnos en paro para estudiar inglés, es cierto que mientras estamos trabajando es más difícil sacar tiempo para ir a clase o estudiar por nuestra cuenta.

 

3. Hacer ejercicio

El sedentarismo es un mal que no sólo afecta a quienes tienen un trabajo de oficina, sino también a muchas de las personas que están en paro y pasan muchas horas delante del ordenador buscando ofertas de trabajo y enviando su currículum a las empresas. Si es tu caso, intenta hacer ejercicio con regularidad y siempre en la medida de tus posibilidades. Te vendrá bien para el cuerpo y para la mente.

 

4. Buscar nuevas aficiones

Entre las cosas que hacer en el paro también está dedicar tiempo a las aficiones que ya tenemos o a buscar otras nuevas. Por ejemplo, las actividades DIY (“Do IT Yourself”), como hacer punto, lettering, mandalas, abalorios, bricolaje…

 

5. Viajar

Cuando tenemos trabajo es difícil que tengamos tiempo para viajar más allá de las vacaciones de verano. Y si estamos en situación de desempleo, puede que tengamos tiempo pero no dinero. En cualquier caso, no hace falta hacer el viaje de nuestra vida cuando estamos en paro, pero sí es recomendable, siempre que sea posible, hacer alguna escapada para desconectar del día a día, abrir la mente y encontrarnos con nosotros mismos.

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Jorge Aznal Rueda OficinaEmpleo.com

Los 5 trabajos más fáciles de acceder a partir de los 40

 

Aunque quien los haya cumplido o los vaya a cumplir próximamente pueda no estar de acuerdo, los 40 son por lo general una buena franja de edad. También en lo relativo al trabajo, al menos en la teoría, porque en la práctica hay muchas personas desempleadas en esa franja de edad (y en el resto) que tienen problemas para encontrar trabajo, como ocurre con muchos trabajadores mayores de 50 años.

Con 40 ó 45 años, una persona reúne la experiencia que aún no tienen los más jóvenes y, siempre por lo general, cuenta con más energías que alguien que esté en una edad cercana a la jubilación. Si lo vemos así, los 40 serían una edad perfecta para tener un buen trabajo.

trabajos para gente de 40 años

Algunos trabajos son más accesibles para personas de más de 40 años que para candidatos más jóvenes (iStock)

Sin embargo, la realidad es muy distinta y muchos empresarios y profesionales de recursos humanos prefieren contratar a candidatos más jóvenes para ahorrar dinero en salarios. Aun así, hay algunos trabajos para gente de 40 años y no tanto para gente de 20, que es algo más habitual. Estos son algunos de ellos:

 

1. Asesor financiero

¿En quién confiarías antes tus ahorros: en una persona que acaba de graduarse o en alguien que acumula bastante experiencia trabajando como asesor financiero? La respuesta puede servir para explicar por qué el puesto de asesor financiero es más uno de esos trabajos para gente de 40 años que, tal vez, para alguien de 20…

 

2. Comercial

Algo parecido ocurre con el trabajo de comercial. La experiencia es un valor importante en muchos empleos y más aún en aquellos en los que el éxito de una empresa depende en gran parte de las ventas que consigan sus comerciales.

 

3. Empresario

También se puede ser empresario con 25 ó 30 años, pero es más fácil serlo a partir de los 40 años, cuando hemos acumulado experiencia y, tal vez, dinero suficiente para ser emprendedores.

 

4. Contable

Si tuvieras que imaginarte cómo sería una persona encargada de la contabilidad de una empresa, ¿tendría el aspecto de alguien muy joven o el de una persona de mediana edad? O, visto de otra forma, ¿a quién de los dos confiarías antes las cuentas de tu empresa?

 

5. Encargado

Trabajar como encargado de una tienda o de un restaurante, como jefe de almacén, como jefe de oficina de una sucursal bancaria o, en general, para trabajar con gente a su cargo, parece más accesible para candidatos de mediana edad que para alguien que está empezando su carrera laboral.

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viernes, 19 de enero de 2018

Requisitos para ser taxista

Lo primero de todo, hay que decir que el servicio del taxi es de carácter municipal, es decir: cada Ayuntamiento es el que pone las condiciones para que sus ciudadanos accedan a una licencia de taxi, aunque no hace falta estar empadronado en ese municipio para poder obtenerla. Por regla general, estos son los pasos que hay que dar para acabar conduciendo un taxi.
Requisitos para ser taxista

Requisitos para ser taxista

1. Carnet de conducir BTP

Para trabajar en un taxi no basta con tener el carnet ‘normal’ de coche, el B1, sino que hay que obtener el BTP, para lo cual hay que superar un examen de carácter mecánico, de 16 preguntas. Para ello puedes apuntarte en una autoescuela o hacerlo por libre. Suele costar unos 100 euros.

2. Examen en el Ayuntamiento

Tras superar este primer examen en Tráfico, deberás acudir a tu Ayuntamiento porque deberás superar uno más. En Madrid por ejemplo se trata de una prueba tipo test (con una tasa de 19,50 euros) de cuatro opciones por cada pregunta (hay más de cien).

3. Una vez superado el examen…

Bien, has aprobado el examen en tu Ayuntamiento… ¿y ahora qué? Ahora deberás acreditar que cumples una serie de requisitos que, como repetimos, pueden variar de un municipio a otro. En el caso de Madrid por ejemplo, esos requisitos son: superar el examen de aptitud; estar en posesión del permiso de conducción de la clase B o superior y de la autorización BTP; carecer de antecedentes penales; no padecer enfermedad infecto-contagiosa o impedimento físico o psíquico que imposibilite o dificulte el normal ejercicio de la profesión de conductor de autotaxi, ni ser consumidor habitual de estupefacientes o bebidas alcohólicas; tener el título de Graduado en Educación Secundaria Obligatoria (ESO), o equivalente. En el caso de titulaciones obtenidas en el extranjero se deberá estar en posesión de la credencial de homologación o convalidación del mismo.

4. La polémica del certificado médico

Como hemos dicho, se pide no padecer una enfermedad infecto-contagiosa. Esto ha generado mucha polémica en municipios como Madrid donde eso impediría a personas con VIH ser taxistas. Las asociaciones vinculadas con la defensa de los derechos de los seropositivos han reclamado que puedan ser taxistas y que la enfermedad se declare como infecto-transmisible.

5. Espero, aún no puedes trabajar…

Para empezar a trabajar en un taxi aún debes superar un duro trámite: hacerte con una licencia. Estas suelen ser vendidas por trabajadores que se jubilan y rondan los 140.000 o 130.000 euros en ciudades como Madrid o Barcelona. La licencia en sí misma te la pueden vender con el coche ya preparado o no. Si no es así, deberás comprar uno de los modelos homologados según la normativa de tu ciudad, lo que te supondrá alrededor de 25.000 euros más (depende ya del modelo). Después tendrás que pintarlo, ponerle la ‘capilla’, el taxímetro y pasar los controles específicos del taxi. Una vez superado esto, ahora sí, puedes salir a trabajar.

¿Prefieres consultar otras formas de conseguir empleo? En Oficina Empleo tienes miles de ofertas como trabajos en Hostelería y Turismo. Además podrás echar un ojo a nuestros procesos de selección para trabajar de camarero en Sevilla, electricista en Cuenca y muchos más. ¡Entra!

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David García OficinaEmpleo.com